Despierta el lado más James Bond que tienes dentro de ti, gracias a la oferta actual de cámaras de vigilancia y dispositivos de espionaje que puedes encontrar en infinidad de establecimientos comerciales y páginas de Internet, como por ejemplo esta, que debe ser algo así como la tienda del espía perfecto. Hoy por hoy las posibilidades que tenemos a nuestro alcance para espiar cualquier conversación o grabar las imágenes en un lugar determinado son casi infinitas, gracias a la miniaturización de los aparatos, la cada vez mayor capacidad de las baterías y a las comunicaciones inalámbricas, que hacen posible la transmisión de datos a través de Internet sin necesidad de cables ni de complicadas y engorrosas instalaciones.
Las mini camaras desde luego han revolucionado en buena parte el escenario del espionaje doméstico, y para investigaciones de tipo periodístico. Hasta ahora estábamos acostumbrados a ver este tipo de aparatos solo en películas y novelas, pero no teníamos la posibilidad de tocar uno con nuestras manos, y mucho menos de comprarlo en cualquier tienda y además a precios tan rebajados como los que se pueden ver hoy en día.
Las posibilidades de camuflaje de las cámaras que se pueden adquirir hoy en día en cualquier tienda online son enormes. Gracias a su pequeño tamaño las podemos colocar en cualquier rincón sin que se advierta su presencia, pero además de ello también podemos ocultarlas en el interior de otros objetos, como espejos o detectores de humo, haciendo que sean cien por cien invisibles.
Un elemento adicional de seguridad es el que aporta por ejemplo una camara de visión nocturna, con sistemas de iluminación por LED que son invisibles desde fuera y que se activan cu and o detectan movimiento en la habitación en la que se encuentran colocados. Los hogares domésticos pueden tener, en definitiva, los mismos elementos de seguridad de los que gozan desde hace tiempo instituciones que requieren una alta seguridad, como empresas, instituciones oficiales o museos. Muchas de estas grabaciones se pueden utilizar como prueba en juicios donde la acusación y los acusados solo podían aportar hasta ahora la palabra de uno contra la de otro.
Pero además de con el movimiento, estas cámaras se pueden activar también con sonido (regul and o por supuesto la sensibilidad a la que reacciona el sistema), a través de la vibración o incluso a través de la detección de calor corporal. Por otro lado también podemos configurar la cámara para que grabe de forma automática a determinadas horas y en los días que digamos, sin ningún tipo de problema. Son características que casi suenan a historia de ciencia ficción, pero se trata de posibilidades técnicas muy reales , que están a nuestra disposición para usarlas como mejor nos convengan. Incluso si se va la luz en la casa vamos a tener la posibilidad de seguir utiliz and o el sistema durante varias horas, gracias a las baterías adicionales que se pueden adquirir como respaldo, y que son un sistema ideal en caso de robo, ya que a veces los ladrones pueden inutilizar el sistema eléctrico de una casa para tratar de desactivar los sistemas de vigilancia. En definitiva, tenemos opciones de sobra para registrar en todo caso a quienes entren en nuestra propiedad sin nuestro permiso.
Los mejores detectives privados saben desde hace tiempo de la utilidad de estos dispositivos para detectar a ladrones, pícaros, esposos o esposas infieles y demás sujetos que suelen ser investigados por particulares y por empresas, después de haber levantado sospechas en su entorno. ¿Por qué no utilizarlas también nosotros en nuestro ámbito personal? Si últimamente notamos que faltan enseres de nuestra casa o dinero que tenemos guardado y tenemos nuestras sospechas, o si últimamente notamos comportamientos extraños en el vecindario, podemos ganar en seguridad y conseguir de paso pruebas concluyentes que demuestren nuestra teoría o la desmientan.
Gracias a la conexión inalámbrica de las llamadas cámaras IP podemos controlar en todo momento lo que se está grab and o en nuestros hogares, us and o como pantalla cualquier ordenador con conexión a Internet, o incluso nuestro smartphone o una tablet, introduciendo la dirección necesaria en nuestro navegador web y accediendo al sistema a través de un nombre de usuario y de una clave, por lo que vamos a tener la seguridad de que solo nosotros somos los que accedemos a estas grabaciones.